“Por un momento los recuerdos pesaron más que las esperanzas, y me envejecí”.
Hoy en día usamos la palabra nostalgia mientras recordamos momentos que hemos idealizado en nuestra memoria - los llamados "viejos tiempos". La nostalgia es como una proyección de nuestra vida. La miramos con melancolía pues sabemos que esos momentos ya no volverán, se quedaron ahí.
Según el diccionario la nostalgia es tristeza melancólica por la ausencia de un bien perdido. Pero también hay que decir que no siempre tiene que inspirar amargura, también es dulce recordar instantes del pasado que ya quedaron atrás. Sentir nostalgia, sin quedar fijados en el pasado, nos sirve para concebir mejor la vida, estando seguros de que no hay nada tan beneficioso como gozar del presente.
Con un futuro limitado delante de nosotros es inevitable que las personas mayores miremos hacia el pasado. De hecho puede ser refrescante hacerlo. Nuestra vida es continua y llevamos nuestro pasado con nosotros mientras avanzamos hacia delante.