Hola laborales:

 Hoy subimos, en el nuevo apartado de las cocineras y los cocinillas, la primera receta; y en este caso una receta muy especial.

Se trata del RABO DE TORO (al estilo cordobés). Nada tendría de muy especial si no fuese porque esta receta se la mandó Rosa Bellido, compañera laboral fallecida, a Francisco Moreno Fernández, ambos componengtes de la XI Promoción de Ingeniería Técnica (1980-1983), y éste, años después de guardarla con todo su cariño, nos la remite tal como ella se la mandó.

Nosotros inauguramos el nuevo apartado con tu receta, Rosa. Va por tí.

Receta nº 1.      

RABO DE TORO AL ESTILO CORDOBÉS


INGREDIENTES:

-Un rabo de toro (cortado y desgrasado).

-Tres dientes de ajo.

-100 grs. de jamón serrano cortado en trocitos pequeños.

-4 tomates rojos.

-Un puerro.

-Una cebolla.

-Dos zanahorias.

-1/4 l. vino tinto (Rioja o Ribera del Duero).

-Un chorreón generoso de brandy.

-Una guindilla de cayena.

-Sal.

-Pimienta.

-Romero.


 

ELABORACIÓN:

Se sofríe el rabo y se le añade también el romero.

 

 

En aceite se fríen los ajos, el jamón troceado y se sella el rabo (sellar es freir con aceite para cerrar poros).

 

 

Se aparta el frito y se pone todo en la olla exprés, con el vino y la guindilla de cayena.

 

Aproximadamente la cocción inicial es de 40 minutos.

 

 

 

Aparte, y mientras el rabo se pone tierno, en una sartén a fuego muy flojo (casi confitando), y troceado, se añade la cebolla, el puerro, las zanahorias y el tomate, en este orden, y dejando unos minutos entre unos y otros, para que cada verdura se vaya haciendo.

 

Casi confitada la verdura (entre 40 y 45 minutos y mientras se está haciendo el rabo), se pasan todas las verduras por el chino y se añaden al rabo, que previamente hemos apartado del fuego.

 

Se añade también el chorreón de brandy. Se mantiene en el fuego la olla otros 40 minutos, en olla normal. El tiempo de cocción se duplica y habrá que añadir más vino por las pérdidas. Id probando hasta que la carne se desprenda fácilmente.

 

 

El rabo deberá quedar pegado al hueso, pero tan tierno que sólo con tocarlo se desprenda.

 

Se puede servir con patatas paja, patatas fritas ... deshuesado o no, al gusto; y más rico de un día para otro.

 

 

Buen provecho.

 

 


ANTONIO JURADO COPADO
ajuradocopado@yahoo.es