“Soy Fernando Muñiz Morilla, natural de Sevilla, pertenezco a la sexta promoción de Ingenieros Técnicos es decir del año 1.975 al 1.978.
Los principios nunca son fáciles y el mió tampoco. Intente trabajar por mi cuenta haciendo proyectos para licencias de aperturas, aquello duro poco, al final me coloque de peón, en  Papeleras del Guadalquivir (PAGUSA), una empresa de Cartón ondulado, aquí pase por todas las categorías, y aprendí, casi todos los oficios del sector, a los once años  de ese primer contrato, llegue a ser jefe de producción.
Con ese empleo me fui, junto con Jorge y Tomas, a Almendralejo, a montar un proyecto nuevo, esto me permitió conocer y trabajar con lo mas avanzado de la industria del cartón, y viajar por centro Europa, aprendiendo, y viendo nuevas fabricas.
Con el mismo empleo trabaje en varias empresas de Córdoba y Sevilla, hasta que el primero de Marzo del 2.004, me diagnosticaron  enfermedad de Parkinson, y aquí termina mi vida laboral, a los dos años aproximadamente me jubile por enfermedad y hoy soy un jubilado mas, que junto con sus compañeros de la Asociación del Parkinson de Sevilla, plantamos cara día a día a esta enfermedad difícil, procurando no ceder ni un milímetro de nuestra movilidad”

 

Asociación Parkinson Sevilla. C/ Fray Isidoro de Sevilla, S/N. 41009 Sevilla
Telf. 954 907 061              www.parkinsonsevillaa.org/

 

Foto del album de Antonio García Morenas (1971-1977)

La foto que manda nuestro compañero Juan Encinas Sanchez, de 1º ITA, de Ingenieria Tecnica, del colegio San Alvaro, creo que corresponde al curso 1975-76, y no al curso 1976-77. La muerte de Franco, Noviembre de 1975, nos pillo en el colegio, o eso creo. Enhorabuena por la pagina.

En curso citado, 1975-76, 1º ITA, coincidimos un grupo proviniente de la U.L. de Sevilla, grupo que permanecio unido los tres cursos de ingenieria, Jose Antonio Dominguez Fernandez "Pilin", Idelfonso Baena Jimenez, "El rasca Huevos", con perdon y Jose Luis Garcia Espinar, "EL Jefe, recuerdo aquel larguisimo pasillo, siempre brillante, especular y el padre Zabalza, lanzando una moneda de diez duros, a ver quien era el guapo que lanzaba mas lejos que él. Las tardes de Otoño en la habitación estudiando, por que allí se estudiaba y de lo lindo, la semana interminable de exámenes y después la vuelta a casa, para volver a empezar. Lo recuerdo todo con cariño a pesar de que fueron años duros, pero con la certeza que te da la propia vida, de que aquello fue positivo, que mereció la pena